Los ronquidos son una afección común que puede afectar tanto a hombres como a mujeres, aunque las razones pueden variar según el género. Si bien se suele suponer que los ronquidos son más un problema masculino, las mujeres no son inmunes a esta alteración del sueño. Comprender los factores que contribuyen a los ronquidos en las mujeres es esencial para controlar y potencialmente reducir su incidencia. En este artículo, exploraremos los mitos comunes sobre los ronquidos en las mujeres, en qué se diferencian los ronquidos en las mujeres de los de los hombres y las diversas causas y factores que contribuyen.
Aviso importante: consulte a un médico si tiene alguna afección médica. No brindamos asesoramiento médico ni hacemos afirmaciones y no somos responsables de los resultados de salud individuales.
Mitos comunes sobre los ronquidos en las mujeres
Los ronquidos son un problema exclusivo de los hombres
Muchas personas creen erróneamente que los ronquidos son un problema de hombres, pero eso está muy lejos de ser cierto. Las mujeres pueden roncar y, de hecho, lo hacen, y aunque quizás se hable menos de ello, es un problema de sueño común que afecta a muchas. Este mito puede impedir que las mujeres busquen ayuda o tomen medidas para controlar sus ronquidos. Reconocer que los ronquidos no están limitados por el género puede alentar a las mujeres a abordar el problema sin sentirse avergonzadas o aisladas.
Los ronquidos siempre son un problema grave de salud
Si bien los ronquidos fuertes y persistentes a veces pueden indicar una afección más grave, como la apnea del sueño, no todos los ronquidos significan que existe un problema de salud crítico. En muchos casos, los ronquidos pueden desencadenarse por factores manejables, como el aumento de peso, el consumo de alcohol o incluso dormir en una posición incorrecta. Si los ronquidos son leves y no interrumpen el sueño, por lo general no son peligrosos.
No hay nada que puedas hacer con respecto a los ronquidos
Es fácil pensar que los ronquidos son algo que no se puede controlar, pero eso no es del todo cierto. Muchos de los factores que provocan los ronquidos se pueden controlar y pequeños cambios en el estilo de vida, como perder peso o dormir de lado, pueden reducir significativamente los ronquidos. Comprender qué desencadena los ronquidos en las mujeres permite un mejor control y un posible alivio.
En qué se diferencian los ronquidos femeninos de los masculinos
- Prevalencia de los ronquidos: aproximadamente el 50 % de los hombres de mediana edad son roncadores habituales, mientras que aproximadamente el 25 % de las mujeres de mediana edad roncan. Aunque es menos común en las mujeres, los ronquidos aún afectan a una parte significativa de la población femenina.
- Factor edad: Para las mujeres, la probabilidad de roncar aumenta con la edad, alcanzando su punto máximo entre los 60 y 65 años. Los cambios hormonales durante la menopausia a menudo contribuyen a este aumento de los ronquidos.
- Apnea obstructiva del sueño (AOS): una de cada diez mujeres de mediana edad padece apnea obstructiva del sueño, una afección en la que la respiración se detiene repetidamente durante el sueño. Si bien los hombres son los más frecuentemente diagnosticados con AOS, es un problema que afecta a muchas mujeres, especialmente después de la menopausia.
- Gravedad de los ronquidos: las mujeres tienden a roncar más suavemente que los hombres, pero el impacto en su sueño puede ser igual de perturbador. Las personas con ronquidos moderados a severos pueden despertarse con frecuencia durante la noche, jadeando o ahogándose debido a la interrupción de la respiración.
- Síntomas adicionales en mujeres: Las mujeres que roncan tienen más probabilidades de presentar síntomas secundarios como dolores de cabeza matutinos, fatiga extrema durante el día, alteraciones del estado de ánimo como ansiedad o depresión y dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormidos (insomnio). Estos síntomas suelen hacer que las mujeres busquen atención médica, incluso cuando sus ronquidos no son excesivamente fuertes.
Causas hormonales y médicas de los ronquidos en las mujeres
Menopausia
La menopausia es una etapa importante de la vida para muchas mujeres, marcada por una caída drástica de los niveles de estrógeno y progesterona. Estas hormonas son fundamentales para mantener el tono muscular en el cuerpo, incluidos los músculos de la garganta y las vías respiratorias. A medida que las mujeres envejecen y entran en la menopausia, la disminución de estas hormonas conduce a la relajación de los músculos de la garganta durante el sueño, lo que aumenta la probabilidad de roncar.
Además, la menopausia suele provocar un aumento de peso, especialmente alrededor del cuello, lo que puede estrechar aún más las vías respiratorias y contribuir al aumento de los ronquidos. Las mujeres posmenopáusicas también corren un mayor riesgo de desarrollar apnea obstructiva del sueño (AOS), una afección grave en la que la respiración se detiene y se reinicia repetidamente durante el sueño, lo que a menudo se manifiesta como ronquidos fuertes.
Embarazo
El embarazo es otro período de profundos cambios en el cuerpo de la mujer, y muchas mujeres que nunca antes roncaron pueden comenzar a roncar durante este período. Varios factores contribuyen a esto, incluidos los cambios hormonales, el aumento de peso y el aumento del flujo sanguíneo. El aumento de los niveles de estrógeno y progesterona durante el embarazo hace que los conductos nasales se hinchen, lo que provoca congestión y dificultad para respirar por la nariz, lo que obliga a respirar por la boca y aumenta la probabilidad de roncar.
A medida que avanza el embarazo, el feto en crecimiento ejerce presión sobre el diafragma, lo que reduce la capacidad pulmonar y dificulta la respiración durante el sueño. Esta combinación de factores hace que los ronquidos sean comunes, especialmente en el segundo y tercer trimestre. Si bien los ronquidos relacionados con el embarazo generalmente se resuelven después del parto, pueden ser un signo de apnea del sueño gestacional, una afección que requiere control y atención médica para garantizar la salud tanto de la madre como del feto.
Hipotiroidismo
El hipotiroidismo se produce cuando la glándula tiroides no produce suficiente hormona tiroidea, lo que provoca una desaceleración del metabolismo del cuerpo. Esto puede provocar aumento de peso y retención de líquidos, dos factores que aumentan la probabilidad de roncar. El exceso de peso, en particular alrededor del cuello, ejerce presión sobre las vías respiratorias, lo que restringe el flujo de aire y hace que los tejidos blandos de la garganta vibren, lo que produce el sonido de los ronquidos.
El hipotiroidismo también afecta el tono muscular, lo que hace que los músculos de la garganta se relajen demasiado durante el sueño. Las mujeres con hipotiroidismo no tratado pueden experimentar mala calidad del sueño, fatiga y ronquidos persistentes.
Diabetes
La diabetes, en particular la diabetes tipo II, está estrechamente relacionada con los trastornos del sueño, como los ronquidos y la apnea obstructiva del sueño. Un control inadecuado de los niveles de azúcar en sangre puede provocar un aumento de peso, lo que, a su vez, aumenta la probabilidad de roncar. Las mujeres con diabetes también son más propensas a la resistencia a la insulina, que se agrava con la mala calidad del sueño causada por los ronquidos o la apnea del sueño.
Además, la apnea del sueño puede exacerbar la resistencia a la insulina, lo que crea un ciclo que afecta tanto al sueño como a la salud metabólica. Las mujeres con diabetes que roncan deben consultar a su médico, ya que controlar los niveles de azúcar en sangre y abordar los trastornos del sueño puede ayudar a mejorar ambas afecciones.
Síndrome de ovario poliquístico (SOP)
El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es un trastorno hormonal que afecta a muchas mujeres en edad reproductiva y está asociado con la resistencia a la insulina, el aumento de peso y los desequilibrios hormonales, todos los cuales pueden contribuir a los ronquidos. Las mujeres con SOP suelen experimentar niveles elevados de testosterona, lo que puede reducir el tono muscular de las vías respiratorias y provocar ronquidos. El aumento de peso en el cuello y la parte superior del cuerpo estrecha aún más las vías respiratorias, lo que aumenta la probabilidad de ronquidos y apnea del sueño.
Apnea obstructiva del sueño (AOS)
La apnea obstructiva del sueño (AOS) es un trastorno grave del sueño en el que las vías respiratorias se bloquean repetidamente durante el sueño, lo que provoca pausas en la respiración y ronquidos fuertes. Es más común en mujeres después de la menopausia y en aquellas que tienen sobrepeso.
Estilo de vida y causas externas de los ronquidos en las mujeres
Aumento de peso y obesidad
El exceso de peso, especialmente alrededor del cuello, ejerce presión sobre las vías respiratorias, estrechándolas y aumentando la probabilidad de roncar. El aumento de peso suele estar relacionado con cambios hormonales como la menopausia o el embarazo, pero también puede ser consecuencia de factores relacionados con el estilo de vida. Mantener un peso saludable mediante una dieta equilibrada y ejercicio regular puede reducir significativamente la probabilidad de roncar.
Alcohol y sedantes
El consumo de alcohol o sedantes antes de acostarse relaja los músculos de la garganta, lo que puede provocar un colapso parcial de las vías respiratorias. Esta relajación aumenta las probabilidades de roncar, ya que el flujo de aire se obstruye. Reducir o evitar el consumo de alcohol y sedantes, especialmente cerca de la hora de acostarse, puede ayudar a minimizar los ronquidos.
Fumar y la irritación de las vías respiratorias
Fumar irrita e inflama los tejidos de la garganta, lo que produce una hinchazón que estrecha las vías respiratorias. Esta restricción aumenta la resistencia al flujo de aire, lo que provoca los ronquidos. Fumar también aumenta el riesgo de sufrir problemas respiratorios a largo plazo. Dejar de fumar puede mejorar la función de las vías respiratorias y reducir significativamente los ronquidos.
Posición para dormir
Dormir boca arriba puede empeorar los ronquidos porque la gravedad hace que la lengua y los tejidos blandos de la garganta se colapsen hacia atrás, lo que obstruye las vías respiratorias. Cambiar de posición para dormir, en particular dormir de lado, puede ayudar a mantener abiertas las vías respiratorias y reducir los ronquidos. El uso de almohadas o ayudas para dormir para mantener la posición de lado puede aliviar aún más los ronquidos.
La falta de sueño y el estrés
La mala calidad del sueño y el estrés pueden provocar un aumento de los ronquidos. Cuando el cuerpo está demasiado cansado, los músculos de la garganta se relajan más profundamente durante el sueño, lo que aumenta la probabilidad de roncar. Establecer una rutina de sueño regular y practicar técnicas de relajación puede mejorar la calidad general del sueño y reducir los episodios de ronquidos.
Congestión nasal y alergias
Las alergias, las infecciones sinusales y la congestión nasal crónica bloquean los conductos nasales, lo que obliga a respirar por la boca durante el sueño, lo que aumenta la probabilidad de roncar. Mantener el entorno para dormir libre de alérgenos, como el polvo y la caspa de las mascotas, puede mejorar el flujo de aire.
Otras condiciones médicas subyacentes
Asma
El asma, una enfermedad respiratoria crónica, puede provocar inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias, factores que contribuyen a los ronquidos. Las mujeres con asma pueden experimentar más dificultad para respirar durante el sueño, lo que provoca episodios frecuentes de ronquidos.
Enfermedad cardiovascular
Cada vez hay más investigaciones que vinculan los ronquidos y la apnea obstructiva del sueño con las enfermedades cardiovasculares (ECV). Las mujeres que roncan tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades como hipertensión arterial, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. La mala calidad del sueño debido a los ronquidos también puede empeorar la salud cardíaca con el tiempo.
Es importante que las mujeres que roncan y tienen antecedentes de problemas cardíacos busquen asesoramiento médico, ya que el tratamiento de los trastornos del sueño puede mejorar significativamente los resultados cardiovasculares.
Tabique desviado
Un tabique desviado, en el que la pared que separa las fosas nasales está descentrada, puede restringir el flujo de aire a través de una o ambas fosas nasales, lo que provoca un aumento de la respiración por la boca y de los ronquidos. Las mujeres con esta afección pueden sufrir congestión nasal frecuente, lo que aumenta aún más la probabilidad de roncar.
Cómo los ronquidos afectan de forma diferente a hombres y mujeres: principales riesgos para la salud
Un estudio de 2018 presentado en la Radiological Society of North America (RSNA) reveló diferencias significativas en el modo en que los ronquidos y la apnea obstructiva del sueño (AOS) afectan a hombres y mujeres, en particular en términos de salud cardíaca. A continuación, se detallan los hallazgos clave y cómo difieren los riesgos según el género:
1. Esfuerzo cardíaco en mujeres
Las mujeres que roncan o sufren de AOS experimentan cambios cardíacos más pronunciados que los hombres. El estudio, que utilizó datos del Biobanco del Reino Unido, descubrió que las paredes del ventrículo izquierdo del corazón, responsables de bombear sangre, estaban engrosadas tanto en hombres como en mujeres. Sin embargo, este efecto fue más severo en las mujeres, lo que sugiere que sus corazones están trabajando más arduamente bajo la tensión de la AOS y los ronquidos.
2. Mayor riesgo de AOS no diagnosticada en mujeres
Una de las principales preocupaciones que destaca el estudio es que muchas mujeres que roncan pueden tener apnea obstructiva del sueño no diagnosticada. Las mujeres tienen menos probabilidades de buscar tratamiento para los ronquidos, lo que significa que su afección a menudo pasa desapercibida hasta que conduce a problemas de salud más graves. Este infradiagnóstico es preocupante porque la apnea obstructiva del sueño en las mujeres puede tener consecuencias graves, como enfermedades cardíacas, hipertensión arterial y diabetes.
3. Síntomas singulares en las mujeres
Los síntomas de la apnea obstructiva del sueño se manifiestan de manera diferente en las mujeres, lo que puede dificultar el diagnóstico. Mientras que los hombres suelen experimentar ronquidos fuertes y pausas notables en la respiración, las mujeres pueden presentar signos más sutiles, como fatiga, dolores de cabeza matutinos y cambios de humor. Estas diferencias significan que las mujeres suelen recibir un diagnóstico erróneo o que sus síntomas se atribuyen a otras afecciones.
4. Impacto en la salud cardíaca
Las mujeres con AOS no tratada o ronquidos habituales enfrentan un mayor riesgo de sufrir problemas cardiovasculares como:
- Hipertrofia ventricular izquierda: Engrosamiento de las paredes del corazón.
- Mayor riesgo de enfermedades cardíacas: el corazón debe trabajar más para bombear sangre.
- Tasas más elevadas de hipertensión: la AOS contribuye a la presión arterial alta, que puede empeorar si no se trata.
5. Otras complicaciones de salud
Además de los problemas cardíacos, las mujeres con AOS tienen mayor riesgo de:
- Ataque
- Diabetes tipo II
- Resistencia a la insulina
- Síndrome metabólico
- Fatiga, que puede afectar el funcionamiento diario y la seguridad en el trabajo o al conducir.
Conclusión
Los ronquidos en las mujeres pueden deberse a diversos factores, muchos de los cuales están relacionados con la anatomía del cuerpo, los cambios hormonales y los hábitos de vida. Por ejemplo, ciertas condiciones como el embarazo y la menopausia desencadenan cambios hormonales que afectan el tono muscular de la garganta, lo que aumenta la probabilidad de roncar. De manera similar, el aumento de peso (especialmente alrededor del cuello) ejerce una presión adicional sobre las vías respiratorias, lo que puede estrecharlas y provocar ronquidos. Otros factores, como la posición al dormir, la congestión nasal o el consumo de alcohol antes de acostarse, también pueden contribuir a este problema común.
Las afecciones médicas como el hipotiroidismo, la diabetes o la apnea obstructiva del sueño (AOS) también contribuyen de manera significativa a los ronquidos en las mujeres. La AOS, en particular, es una afección grave en la que las vías respiratorias se bloquean durante el sueño, lo que provoca pausas frecuentes en la respiración y ronquidos fuertes. Muchas de estas causas subyacentes, especialmente cuando no se tratan, pueden provocar problemas de salud más graves. Comprender estas causas ayuda a identificar el enfoque adecuado para controlar los ronquidos, ya sea mediante cambios en el estilo de vida o consultando a un médico.